EL DIRECTOR DE DERECHO DE LA UAEMEX LEVANTA LA MANO PARA RECTOR
OPINIÓN
En el marco del periodo electoral que está por vivirse en México en los ámbitos federal, estatal y municipal y en medio del jaloneo político que se vive en el Estado, entre la Universidad Autónoma del Estado de México y la Legislatura del Estado comandada primordialmente por Morena; varios personajes han levantado la mano para ocupar el cargo de rectora o rector de la máxima casa de estudios; entre ellos, al que muchos universitarios refieren como el caballo negro J. Dolores Alanís Tavira, actual Director de la facultad de Derecho, quien en diversas entrevistas dadas a diversos medios, no descartó su candidatura para ese cargo.
Y es que al inicio de este 2021 hubo varios destapados y destapadas, entre ellos, varias aspirantes como son: la Doctora María Dolores Duran García quien preside la Facultad de Ingeniería pero de quien se dice carece de la experiencia en gobierno para sacar a flote al barco; la Doctora en Ciencias Sociales Martha Patricia Zarza Delgado, quien es Directora de Arquitectura pero ligada con el exgobernador Eruviel Ávila Villegas; de la misma forma se destapó la Doctora en Educación Sandra Chávez Marín Secretaria de Extensión y Vinculación de Rectoría, de quien se afirma que su doctorado carece de credibilidad; además de que destaparon el Maestro en Estudios Urbanos Marco Antonio Luna Pichardo, Secretario de Docencia de la Universidad quien está vinculado con Alejandro Osuna Rivero; el Maestro en Economía Javier González Martínez, Secretario Técnico de Rectoría, de quien se dice que es familiar consentido del rector Barrera Baca; el Doctor en Ciencias Sociales y Políticas Luis Raúl Ortiz Ramírez de quien se sostiene que es el hijo prodigo del actual rector; el Doctor en Humanidades Juvenal Vargas Muñoz Secretario de Rectoría, pero quien forma parte de las tribus morenistas que quieren mandar en la UAEMex; el Doctor en Sociología Bernardino Jaciel Montoya Arce quien es coordinador del Centro de Investigación y Estudios Avanzados de la Población, pero que ha estado envuelto en múltiples señalamientos por acoso y quien se jacta de ser el dictador en ese centro de investigaciones; así como el eterno aspirante Doctor en Planeación Urbana Fermín Carreño Meléndez quien es tropa y golpeador de Morena e incluso se dice que ocupa un cargo en su comité ejecutivo estatal, y quien afirma que la legislatura le dará la rectoría.
Con lo que el ambiente en la universidad está al rojo vivo en virtud de que la convocatoria deberá emitirse por el Consejo Universitario en la segunda mitad de febrero de este año, estando los ánimos polarizados, no solo por la pandemia provocada por el virus SARS-COV2, si no también debido a los múltiples temas no resueltos como son: la “Estafa maestra” que involucra a conocidos personajes de la política nacional, del Estado de México y de la propia Universidad; todo ello sumado a que la casa de estudios ha sido el centro de atención de múltiples movimientos feministas cuyo auge sigue vivo; aunado al elevado y evidente grado de nepotismo que se ha manejado como una “forma de vida” de los universitarios, ya que es conocida la práctica de ingresar a familias completas para ocupar las plazas de docentes y administrativos sin tener la capacidad para ser académicos y catedráticos.
Es así que el director de la facultad de Derecho es el último destapado y muchos afirman que es el caballo negro que puede dar la sorpresa, por no ser un personaje oficial, ni del agrado de rectoría, además que no tiene padrinos conocidos que le hablen al oído al rector o a la legislatura. Pesada carga tiene el consejo universitario, pues dadas las condiciones, sería inviable una prolongación del periodo del actual rector, o dejar encargado de despacho, por lo que la elección de rector o rectora se torna lo más conveniente para que los propios universitarios decidan su rumbo en este entramado de intereses políticos que se miran a kilómetros.